Una Temporada en el Infierno fue escrita por el poeta francés Arthur Rimbaud en 1873 a la edad de 19 años como resultado de su tormentosa relación con el, también poeta, Paul Verlaine; redefiniendo con esta obra la poesía moderna, elevándolo a la categoría de genio y creando nuevas formas de apreciación artística. Fue esta frontalidad en su verbo y espíritu de rebelión hacia lo establecido el que lo convirtió en un símbolo de su época, precursor de la escuela simbolista e inspiración e influencia para los surrealistas y dadaistas.



eSTANCIAS: vÍA aBAJO  es el camino al infierno de un personaje ficticio, un cuenta-cuentos habitante de un espacio que no distingue lo público de lo privado. Un recorrido onírico de sensaciones y tiempos propios e irrepetibles, una pesadilla vívida o un juego escénico en el que todos los presentes participan. Dividida en 9 cuadros y un prefacio, esta creación contiene características de intervención corporal, o sea un espacio afectado por el intérprete, su director y cada uno de los espectadores, quienes pasan a formar parte integral de una escena democrática que no separa el escenario del público pudiendo este moverse libremente, optando por cómo y desde dónde verá la coreografía, convirtiéndose en un participante activo de la escena. El montaje, de tipo modular, se presenta en forma aleatoria y divisible en sus partes por lo que carece de un orden narrativo especifico, lo que hace de cada función una experiencia única e irrepetible.

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El interes al desarrollar esta creación era indagar en los puntos de vista, tanto del espectador al enfrentarse a un resultado escénico, como del creador al desarrollar cuadros narrativos independientes aunque aparentemente hilados, carentes de un orden de presentación predeterminado, por lo que no se pretende un efecto dramático particular sino el entregarse a las diversas experiencias propuestas por el montaje. Cada escena es una narración en sí misma o una poesía independiente de las demás; tal como al leer un libro de poemas podemos elegir uno cualquiera sin necesidad de leer el total o en orden correlativo.